Adornos que alegran y dan color, encienden en nuestras vidas sensaciones que existen siempre, marcando una época que nos saca de la rutina y nos lleva a la costumbre, una costumbre que nos vuelve diferentes, pero nos empuja a formar parte de un colectivo homogéneo, entre los grupos se pierde el individuo en un mar indistinguible, y entre sus iguales es invadido por la inercia, compartir lo que no se es, mostrar lo que no se tienes, disfrutar lo que no se debe, y resurgir de entre todas aquellas mascaras, para encontrar donde siempre ha estado, lo que no ha buscado, el cariño nunca perdido, el amor jamás olvidado, la alegría de un momento entre aquellos que le distinguen como único.
Kisses
Jessica
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